Mario Vertigo es un tío muy guapo. Un twunk sexy como a mí me encanta. Se ofreció a pasar la tarde dándome masajes y adorándome: ¡un verdadero placer! Le encantó acariciar mi musculoso cuerpo XXL y, al cabo de un rato, mi enorme polla de macho le dio ganas de hacerlo. Chupó, hicimos un 69, yo me ocupé bien de él y él se corrió conmigo.